La red académica de la
lengua define así los siguientes términos:
Libertad: Facultad y derecho de las personas para
elegir de manera responsable su propia forma de actuar dentro de una sociedad.
Consumismo: Tendencia al consumo excesivo e innecesario de bienes y
productos.
Entre ambos deambula el ser humano. No termina por ser libre cabalmente
cuando se vuelve irresponsable, como por ejemplo, el consumo innecesario. Sin
embargo, ¿dónde nos encontramos cuando hablamos de procrear? En una entrevista
realizada a la autora del libro “No Kid. 40 buenas razones para no tener hijos”
Corinne
Maier, comenta lo siguiente:
“Las grandes compañías
esperan que nosotros tengamos hijos, porque los hijos hacen que los padres
consuman mucho. Si eres padre, compras casas, autos, lavarropas,… consumes más
que si estuvieras solo.”
“Los niños contaminan mucho,
y nos hacen consumir más. El mundo está superpoblado, entonces tal vez no
necesitamos más hijos.”
“Tu vida cambia cuando
tienes un hijo. Y eres más un padre, y claro, estás más ocupado con el niño y
simplemente ignoras tu vida. Las mujeres están muy ocupadas con ellos, y
entonces, no alcanzan otras metas en la vida.”
“Francia tiene un alta tasa
de natalidad, porque es aburrida. Entonces no sabemos qué hacer con nosotros
mismos y entonces tenemos hijos.”
Estas afirmaciones que realiza
Corinne Maier (economista y psicoanalista), es posible que el mexicano promedio
al leer tales dichos, primero lo niegue mentalmente, después si existe un
resquicio en la psique podrá planteárselo para analizarlo, pero la mayoría
terminará la lectura como algo anecdótico y ya. ¿Por qué? En México en especial,
tenemos la mayor tasa de católicos en el mundo (Ver gráfica). Somos más
católicos que el Papa y que los españoles juntos. Y este es un problema desde
la llegada posterior de los evangelizadores españoles a la fecha, como dice
Rius “500 años fregados pero cristianos”; “¿Cuántos hijos va a tener? Los que
me mande Dios”, hoy mismo (abril 2017) usted puede ver en micros, rutas,
propaganda “evangelizadora” de lo que significa “la familia” y se resume a
procrear.
| De Starfunker226 - Trabajo propio, CC BY-SA 3.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=10681093 |
Entonces podemos pensar que
iglesia y transnacionales son sinónimos de no permitir alcanzar su plena
libertad al ser humano, y esto porque como leíamos: la libertad es la facultad,
la capacidad del hombre o la mujer para ELEGIR de manera RESPONSABLE.
Platón dice que la falta de
responsabilidad, es ignorancia; y la ignorancia o inconsciencia causa
sufrimiento a nosotros mismos y a los demás. Osho afirma que tener
conciencia de la responsabilidad que nos compete es el inicio de la
transformación y el comienzo de una nueva vida.
También existe hoy, un número creciente de jóvenes que empiezan a elegir
responsablemente, la soltería como un plan de vida. Ante este nuevo paradigma,
la Iglesia y las empresas también empiezan a cambiar su discurso y sus
estrategias de venta, para adecuarse. Entonces se vuelve evidente que no les
interesa tu vida sino lo que tu vida puede darles en su beneficio.
Corinne Maier también hace
mención del aburrimiento, la ociosidad como medio de actos irresponsables. Las empresas
y en especial, las “nuevas” tecnologías fomentan este fenómeno de ociosidad
colectiva. Carlos Slim propone semana laboral de 3 días (Ver, Forbes). Mención
aparte el enorme problema de obesidad (falta de elección responsable) que
padece el país por productos procesados, refresco y ocio. La iglesia en México
cuenta con infinidad de días festivos durante todo el año que se acomodan
perfectamente con las empresas como la navidad por mencionar uno, de las
conmemoraciones que promueven más el consumismo. Pero que no resuelven el cada
día mayor sin sentido de la existencia del hombre o vacío existencial. La falta
de comunicación y entendimiento en las parejas es inversamente proporcional al
número de hijos de acuerdo con un estudio de las
investigadoras Susan Pick y Patricia Andrade (de la Facultad de Sicología de la
UNAM), y su nivel de satisfacción marital. En el mismo sentido, un estudio de
las académicas Roxana Mora, Maricarmen Gómez y Elena Rivera, de la Universidad
Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, documentó que los matrimonios sin hijos
manifestaron mayor satisfacción en su relación de pareja, en sentido inverso de
los que tienen hijos pequeños (Camacho, La Jornada).
Referente a la paternidad,
también nos lleva al egocentrismo, tener niños se vuelven extensiones de los “éxitos”
del individuo en la vida y de la misma propaganda evangelizadora y mercantil
¿Por qué la ADOPCIÓN no cuenta con la fuerza necesaria de ambos sectores como
lo hacen con la procreación?
La falta de ELECCIÓN
RESPONSABLE en la mujer y el hombre está causando estragos irreversibles en el
planeta. Una mayor toma de conciencia (qué soy, quién soy, qué quiero), mayor
conocimiento del entorno (qué son, quiénes son, qué quieren) y hombres libres
de prejuicios religiosos son necesarios y urgentes, si no queremos terminar
siendo una especie en extinción.
Gerardo Aguilar